El catálogo de buenas prácticas permitirá establecer una base de capacitación real para los visitantes del centro, se trata de que los asistentes a la capacitación se lleven buenas ideas para ponerlas en práctica en sus lugares de origen y, por otro lado, se pretende dar a conocer las evaluaciones que de cada buena práctica se hagan para dar a conocer su efectividad e impacto.
En cada una de las buenas prácticas se da un costo aproximado y el número de buenas prácticas que se requieren para trabajar en la microcuenca, con el objetivo de que los lectores y posibles colaboradores-donantes –patrocinadores tengan una idea de lo que podrían ayudar.